Reflexiones de una mota de polvo en el desierto
Han pasado muchas cosas desde mi último post.
Ahora que veo que alguien puede seguirme y que hay gente que se interesa, me detengo aquí para hacer un punto de reflexión.
Cosas han pasado tales como el caso Noos, que sigue en funcionamiento, los escandalos de PP y PSOE, los intentos de separatismo que intenta Catalunya, y algunas cosas más que desde que empecé este blog, no han cambiado ni ún ápice.
Los políticos siguen aprovechándose, si no es un partido el que sale con controversias, es otro, los catalanes y los vascos siguen queriendo independizarse... la vida no cambia, no evoluciona. Siempre es lo mismo y siempre tendremos lo mismo.
Allá en otros países, hay cosas que van cambiando y evolucionando, pero básicamente son las mismas. La evolución que ha marcado nuestro camino sigue siendo bastante floja.
Y ahora que lo pienso, ya no me interesa ésta humanidad. Si pudiera me largaría de este planeta apestoso, podrido y moribundo. Pero lo que huele mal no es el mundo en sí... sino la gente que se ha quedado atascada en su propio día de la marmota.
El otro día caí en la cuenta de que no progresamos lo suficiente, no hacemos porque ésto siga adelante. Y tengo muy claro por lo que és.
Cito casi textualmente un comentario que lejos de ser jocoso, es la realidad del día a día:
"LA COMODIDAD DE LA PROPIEDAD, EL PLACER DE EJERCER EL PODER, EL MIEDO A PERDERLO... TODO ESTO HA FORJADO LA VANIDAD DEL SER HUMANO, Y LO PEOR, ES QUE LO VA A CONVERTIR EN SU PROPIA TUMBA...
...EL PODER DE UN POLITICO O DE UN REY, DESCANSA EN LA PROSPERIDAD DE SU PUEBLO. HACE FALTA REDISTRIBUIR LA RIQUEZA PARA CONSEGUIR AVANZAR. LO QUE NO DEBE HACER ES ACAPARAR ESA RIQUEZA PARA SI MISMO...
...COMO EL PODER SIEMPRE HA SIDO DEL PUEBLO, EL POLITICO O EL REY QUE QUIERA TENER MAS RIQUEZA Y PODER SIN QUITARSELA A SU PROPIO PUEBLO Y QUE ESTO LO QUITE DE SU POSICIÓN, SE DA CUENTA DE QUE HAY QUE SALIR A BUSCAR ESAS RIQUEZAS. SE INVENTAN ENTONCES LAS GUERRAS".
En las guerras ocurrre lo que pasa en el primer párrafo de la cita, convirtiéndo este modelo de sociedad en una pescadilla que se muerde la cola.
Pero eso funcionaba cuando los seres humanos podían discurrir y pensar menos que una cucaracha, cuando lo que primaba era la supervivencia al no tener conocimientos técnicos.
La humanidad a día de hoy ha llegado a un estancamiento del que, si no hace lo que debe, se hundirá y se perderá para siempre.
A buenas horas nos damos cuenta de que vivimos en una hoja de papel que puede ser rota, quemada, reventada... y los pocos que se dan cuenta, no pueden hacer nada por evitarlo ya que hay otros que aún se encuentran en la edad de piedra. Por desgracia, los políticos y los que mandan aún se encuentran en esa fase.
Es penoso ver que para que una sociedad humana avance, tengan que ser las guerras y las envidias lo que la hagan progresar tecnológicamente.
Hemos dado prioridad a vivir cómodamente aprovechándonos de los demás, a la envídia, a la destrucción de lo ajeno para poder vivir con una falsa tranquilidad, que a escoger el camino que es realmente el sencillo. No es vivir... es CONVIVIR en una sociedad que se ayude mutuamente, donde lo prioritario fuera avanzar para poder tener una vida mejor entre todos, donde no sea el dinero y una economía más fuerte que otra lo que esté en nuestra mente, sino que sea el afán del hombre por descubrir cosas nuevas, por mejorar lo que hay lo que deberia mover este mundo.
Esto me hace volver a pensar que el ser humano es gandul, envidioso, agresivo... y que és más fácil obtener las cosas por la fuerza que por el esfuerzo. Es más sencillo quitárselo a otro que ya ha hecho el esfuerzo que esforzarse en mejorarlo... y en compartirlo con los demás para que todos podamos vivir con ésa comodidad.
Por eso me apesta este planeta, porque como el agua estancada, nos hemos quedado bañandonos en nuestra propia podredumbre y poco a poco nos estamos hundiendo.
Con la antigüedad que tiene la civilización humana, ya deberíamos ser capaces de viajar por nuestro sistema solar como quien viaja de Madrid a Barcelona. Deberíamos ser capaces ya de convertir áridos desiertos en vergeles llenos de vida ya fuera en la propia Tierra como en el mismisimo Marte. Deberiamos ser capaces de dominar la energía y proporcionarla gratuítamente para el sostén de nuestra especie.
Pero por lo visto, estamos ligados a nuestra propia extinción debido a nuestros actos.
Vivimos en nuestra hoja de papel pensando que estamos seguros. Hemos convertido nuestra hoja de papel en un barquito de papel sin darnos cuenta que flota mejor una hoja abierta en el agua que un barquito que se hunde. La corriente nos lleva inexorablemente al final del recorrido, que podría ser maravilloso, pero no queremos darnos cuenta que cualquier cosa podría rasgar nuestra hojita de papel en la que vivimos. Preferimos vivir queriendo ser ajenos a lo que nos ocurre.
Allá vosotros, pero a mí no me liéis porque yo no quiero estar en el mismo barco.
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